Ahora más que nunca es muy importante pensar en nuestro futuro económico desde que iniciamos nuestra actividad laboral con la finalidad de que cuando ya no podamos trabajar podamos vivir de lo que ahorramos desde que comenzamos a trabajar.
La AFORE (Administradora de Fondos para el Retiro) es un tipo de institución financiera especializada que realiza y administra inversiones a largo plazo por cuenta de los trabajadores afiliados al IMSS y al ISSSTE. A cada trabajador se le asigna una cuenta en la que se aportan las cantidades que por ley se retienen de su salario para su jubilación a lo largo de su vida laboral. Cada mes se destina a tu cuenta de Afore el 6.5% de tu salario base de cotización ante el IMSS. De ese porcentaje, tu patrón aporta el 5.15%, tú el 1.125% y el Gobierno Federal 0.225%. Todo el dinero reunido en la AFORE se invierte para generar rendimientos, procurando aumentar el valor de las inversiones para que el saldo total al momento del retiro sea mayor.
Las ventajas de la AFORE son que, para empezar, es algo que tienes por ley si trabajas en una empresa. Nos lo da el gobierno para protegernos y garantizarnos que vamos a tener algo en la etapa más vulnerable de nuestras vidas.
Necesitas tener 1250 semanas cotizadas para tener derecho al sistema de salud del IMSS y a la pensión a partir de los 65 años. Si tu pensión no alcanza a 1 salario mínimo… el Gobierno Federal pagará la Pensión Mínima Garantizada o lo que hoy serían $3,746.
Si tienes al menos 750 semanas cotizadas (14 años) tienes derecho a acceder al sistema de salud pero no a la pensión y si tienes menos de 750 ni salud ni pensión. Es decir te darán el monto que hayas acumulado en tu AFORE pero sin acceso a retiro programado o renta vitalicia.
Si no eres trabajador, puedes abrir una cuenta, pero tu cuenta individual no recibirá aportaciones del patrón.
Las desventajas de la AFORE son que por lo bajo de los porcentajes que aportan el patrón, el gobierno federal y el mismo empleado, el valor de lo que se recibe al momento de la jubilación es muy bajo. Se estima que el monto mensual que vas a recibir va a ser entre un 20 % a un 25% tu ingreso promedio.
Por otro lado el número de personas trabajando por su cuenta, está creciendo considerablemente. Eso implica que muchos no entran en la nómina de empresas y, por ende, no cuentan con AFORE. Por eso es vital el empezar a ahorrar por nuestra cuenta para que el retiro no nos agarre desprevenidos.
Para solucionar este problema, podemos considerar contratar un Plan de Ahorro para el Retiro con instituciones privadas. Esta es una herramienta adicional que puede hacer crecer el ahorro para tu retiro que tengas en tu AFORE, o reemplazarla en caso de que no tengas. La forma en que funcionan es que pagas una prima anual o mensual, y una parte de esa prima se va acumulando en un fondo de inversión administrado por la propia aseguradora, y así, cuando llegas a la edad de retiro que hayas escogido, puedes recibir ese dinero. Lo mejor es que puedes recibir tu ahorro para el retiro en rentas vitalicias o en un Fideicomiso.
La ventaja de estos planes es que muchos tienen seguro y que además de ofrecer un rendimiento más alto que el de las AFOREs te permite protegerte a ti y a tu familia en caso de que un accidente o enfermedad te dejen con una invalidez o si llegaras a faltar. Se puede cotizar en diferentes monedas, como en dólares o UDIs. Esta última no es una moneda, sino una unidad de medida que va indexada a la inflación, es decir, el dinero no perderá valor con respecto a la inflación.
La desventaja de contratar un Plan de Ahorro para el retiro con seguro es que si no estás bien de salud puedes no ser asegurable. Existen muchas aseguradoras y cada una tiene varios productos. Tienes que estar bien asesorado para recibir lo que de verdad necesitas y un plan que se adapte a ti.
Lo más recomendable, si puedes, es tener las dos. Una, porque es una prestación a la que tienes derecho como trabajador empleado formalmente, y la otra como una previsión adicional que tú tomas.
Tener una planeación financiera para tu retiro en estos tiempos ya no es un lujo, es una necesidad.
Como siempre si tienes alguna duda no dudes en contactarme.
Lau