El Seguro Educativo es un instrumento financiero que les permite a las familias prevenir y planear con anticipación el futuro educativo de los hijos. Entre todas las opciones que tienes para garantizar su educación es importante que elijas la alternativa adecuada para tus hijos.
Tan sólo de cada 100 niños que entran a la primaria, únicamente 4 se gradúan de una carrera. Para evitar que tus hijos pasen por esta situación, la mejor opción es proteger su futuro con un seguro educativo.
Un consejo recurrente es que antes de adquirir cualquier instrumento financiero hagas una evaluación de las finanzas familiares, ya que el Seguro Educativo representa un gasto que durará varios años según la edad de tus hijos. Comúnmente el periodo de ahorro de un Seguro Educativo tiene una duración de entre 15 y 22 años.
Una característica importante y que debemos destacar es que las compañías aseguradoras te dan la oportunidad de ahorrar en pesos, dólares o Unidades de Inversión (Udis). Al momento de contratar la póliza es muy importante que lo tomes en cuenta pues de esto dependerá el monto que recibirás al final del periodo de inversión.
El seguro educativo se compone de tres elementos:
- Ahorro: Cantidades fijas que tú determinas en la contratación del seguro y que pagas periódicamente para alcanzar una suma total que se entregará a tu hijo para su educación cuando el plazo se haya cumplido.
- Seguro: Cubre el riesgo contra invalidez o fallecimiento.
- Inversión: El ahorro acumulado crece con el tiempo para que no pierda su poder adquisitivo.
Por otro lado, si no estás buscando esta opción para tus hijos, es importante también mencionar que la oferta del seguro está abierta para asegurar a nietos, sobrinos, o cualquier familiar al que se desee garantizar una formación profesional.